Este robot de seguridad japonés no se anda con contemplaciones. Si nota una actitud agresiva, no duda en lanzar una bomba de humo…
FUENTE: computerhoy.com
AUTOR: Juan Antonio Pascual Estapé
Una de las áreas en donde los robots pueden ser realmente útiles, es en la seguridad. Mejor exponer al peligro de un asaltante a un robot, que a un humano.
Cocobo es un robot de seguridad autónomo creado por la compañía japonesa SECOM. Lo definen como un «robot de cooperación cognitiva» porque colabora con los humanos de una manera integral, como uno más.
Ha sido diseñado bajo el lema «dignidad y amabilidad«. Y la verdad es que resulta bastante amable… hasta que te comportas de forma agresiva o sospechosa: entonces no duda en gasearte con humo para que te asustes o te disperses… Puedes verlo en el vídeo:
Cocobo es un robot de seguridad autónomo dotado de inteligencia artificial.
Patrulla por la zona asignada, en busca de comportamientos sospechosos. Posee un brazo con una cámara extensible para mirar por lugares estrechos, como los bajos de un coche, o detrás de una máquina expendedora.
Avisa mediante una alarma, una notificación, o señales luminosas, si descubre a alguien intentado abrir una puerta cerrada, unas taquillas, o está corriendo por áreas no habilitadas para ello.
Si ese sospechoso no se detiene, o se avalanza contra él, le lanza una bomba de humo.
También detecta personas que se han caído al suelo, para avisar a emergencias, así como bolsas de deporte abandonadas, que podrían contener una bomba. O basura que hay que limpiar.
A través de la nube se conecta con los sistemas de seguridad del edificio y recibe información si se abre el cerrojo de una puerta no autorizada, o se activa alguna alarma.
Y gracias a la protección contra al agua y a sus ruedas todoterreno, también puede patrullar por exteriores.
Cocobo puede avanzar a una velocidad de 6 Km/h, que es más o menos la velocidad de paseo de un humano. Así que no está preparado para perseguir a delincuentes que se escapen corriendo.
Tiene una autonomía de unas tres horas. Cuando se le acaba la batería acude autónomamente a su base para recargarse. No sabemos cuánto tarda.
Cocobo ya patrulla en algunos aeropuertos y empresas privadas de Japón. Es solo uno de los varios robots de seguridad que la compañía SECOM está desarrollando.
Su idea es que apoyen a los vigilantes jurados de seguridad como primera fuerza de choque, ante un eventual problema.
