FUENTE: bolsamania.com
Tras casi dos años luchando contra las consecuencias de una pandemia mundial, es evidente que algunos sectores se han visto afectados, mientras que otros han tratado de adaptarse rápidamente a las nuevas realidades empresariales.
La pandemia ha cambiado drásticamente el comportamiento de los consumidores y las empresas y, como resultado, se ha producido un notable aumento de la demanda de robótica y equipos de automatización.
Los robots que apoyan este tipo de logística habían aumentado antes de la pandemia y el ritmo se ha acelerado aún más debido al COVID-19, ya que cada vez más personas compran en línea.
Es principalmente cuando la mano de obra no puede obtenerse adecuadamente, o cuando el coste de la mano de obra está aumentando, las inversiones en automatización se vuelven más atractivas.
2022 y más allá
El sector de la robótica es muy diverso y sigue expandiéndose, alimentando varias áreas clave como la cirugía, la visión artificial, la automatización de almacenes, los vehículos autónomos y muchas más. De cara al futuro, en AXA IM siguen creyendo que estamos en las primeras etapas de la evolución de la industria de la robótica, y que hay una gran variedad de factores que sustentan sus perspectivas de crecimiento.
Dada la enorme variedad de empresas que participan en la robótica, desde los componentes de fabricación hasta los usuarios finales, sigue siendo un vasto universo con muchas oportunidades diferentes, todas ellas reforzadas por numerosas tendencias estructurales a largo plazo.