Con Japón como máximo exponente, la innovación en términos de autómatas crece a pasos enormes y hasta impensados. Desde hoteles y cafés atendidos por máquinas, hasta el nombramiento de una robot humanoide como CEO de una empresa de bebidas en Polonia.
FUENTE:elplanetaurbano.com
AUTOR: Christian Ali Bravo
Ustedes son muy jóvenes, pero hubo una época (la década de los 90) en que «Los Supersónicos» era el dibujito animado por excelencia. Creación de la icónica dupla William Hanna y Joseph Barbera, planteaba cómo sería la vida de una familia tipo en el (ya no tan) lejano año 2062.
Una casa que flota en el aire, viajes en autos voladores, un perro que habla y Robotina, la inoxidable y fiel encargada de las tareas hogareñas, se destacan en el extenso listado de comodidades y facilidades que otorgaba la tecnología a la vida diaria de las personas.
Nada hacía pensar allá por 1962, cuando se estrenó el programa, que ese escenario optimista y utópico de aspiradoras autónomas, cápsulas con minicámaras para realizar complejos estudios médicos, relojes inteligentes, videollamadas y turismo espacial estarían al alcance de nuestras manos de manera tan anticipada.
Pero el futuro llegó hace rato, al mundo en general y a Japón en particular. Porque desde hace varios años, la tierra del sol naciente se erige como la gran meca de la vanguardia tecnológica. Solo basta remontarse a 2015, cuando en Sasebo, ciudad cercana a Nagasaki, abrió sus puertas el hotel Henn na, con el principal atractivo de que su recepción no era atendida por seres humanos sino por dinosaurios robots. Por suerte, estaban más instruidos en turismo, idiomas y atención al cliente que los de las películas de Spielberg.
Y desde ese momento hasta hoy, la tecnología evolucionó de una manera exponencial y casi incontrolable, lo cual se tradujo inevitablemente en situaciones que parecerían sacadas de un episodio de la última temporada de «Black Mirror». La realidad superando a la ficción, capítulo un millón.
UN HOTEL PIONERO DE LA ERA JURÁSICA
No te frotes los ojos, que no es el jet lag jugándote una mala pasada: realmente en la recepción del hotel Henn na te están esperando dos velociraptors. Con presencia en todo el territorio japonés, esta cadena hotelera marcó un hito en el uso de la tecnología en 2015, con este pseudohomenaje robótico a «Jurassic Park».
Pero fiel a su visión, Henn na no se quedó ahí y siguió persiguiendo el progreso. “Dentro de 10 o 20 años, podremos experimentar cambios aún mayores en busca de una comodidad y una conveniencia aún más avanzadas”, afirma categóricamente su página web. No miente: gracias a la tecnología de punta de hologramas de luz, hoy el check-in lo pueden realizar también ninjas y mayordomos virtuales.
Pero calma, que la innovación no se presenta solamente en forma de dinosaurios parlantes y políglotas, merecen un párrafo también las comodidades que ofrecen sus habitaciones entre las que se destacan, por ejemplo: la limpieza automática de la ropa (que quita el mal olor y la deja planchada), la posibilidad de ajustar la temperatura de la cama antes del momento de acostarse, e interactuar con el simpático Robohon, quien con sus 19 centímetros oficia de asistente personal para los huéspedes. Y eso no es todo: el ingreso a la habitación se hace mediante el reconocimiento facial y hasta en las peceras chapotean peces robóticos.
VERDADERAS MÁQUINAS DE CAFÉ
En la siempre sorprendente Tokio, el barrio de Chūō concentra gran parte de la oferta comercial de la ciudad y, también, una de las cafeterías que gracias a la tecnología se convirtió en un referente de la inclusión en todo el mundo. Porque en Avatar Robot Cafe DAWN los meseros son avatares, dispositivos que no utilizan inteligencia artificial para el servicio, sino que son operados remotamente por personas empleadas del propio café con dificultades para salir de su casa o del hospital debido a alguna condición de salud.
Esta forma totalmente altruista del uso de la tecnología permite que los robots humanoides OriHime y OriHime-D, de unos 120 centímetros de altura, puedan recibir a los clientes, ubicarlos en su mesa, recomendar los especiales del menú y hasta preparar el café, siempre gracias a las órdenes que reciben de sus operadores humanos, ya sea a través del uso de un mouse o un control remoto, desde una cama o una silla de ruedas.
De hecho, gracias a que la gran mayoría de los robots están equipados con iPads, los clientes pueden conocer a la persona que está a cargo de pilotear cada avatar. Para que la experiencia sea realmente completa, el café da la posibilidad a quienes lo visiten de dirigir un OriHime, pero sin la responsabilidad, claro está, de atender otras mesas, sino por mero divertimento y exploración.
A TOMARLO EN SERIO
Japón no es el único país que dio un paso hacia el frente en la incorporación de las nuevas tecnologías en la vida cotidiana. La empresa polaca de bebidas Dictador Arthouse Spirits recientemente fue noticia en todo el mundo por la designación de su nueva CEO: Mika.
Y si bien sus declaraciones al asumir fueron mínimamente explosivas, ya que aseguró, entre otras cosas, que es mucho mejor que Elon Musk y Mark Zuckerberg y que no se tomará días libres, lo realmente disruptivo es que Mika es un robot humanoide impulsado por la inteligencia artificial.
Como respuesta a la creencia de que la tecnología llega para dejar sin trabajo a gran parte de la población, en el caso puntual de Mika no se cumplirá ese temido vaticinio, ya que no podrá tomar la decisión de despedir gente. Aunque tampoco de contratarla, ni de gestionar aumentos o nuevos beneficios, claro.
Sus tareas se dividen entre ser parte del consejo de administración para identificar a clientes potenciales, elegir a los artistas que se encargarán de diseñar las botellas y llevar adelante las diversas comunicaciones de la firma. Siempre basándose en un minucioso análisis de los datos del mercado y contemplando los intereses y objetivos de la organización. Todo eso, sin pagarle vacaciones ni bono por productividad.
MC ROBOT CON PAPAS
Fort Worth, en los Estados Unidos, es otro de los grandes paradigmas de cómo la tecnología ganó terreno en espacios que parecían inexpugnables. Histórica y culturalmente vinculada a los vaqueros, esta ciudad texana alberga desde diciembre de 2022 el primer local de McDonald’s atendido íntegramente por robots.
¿Cómo es esto? Simple: en lugar de las personas que se desempeñaban en las cajas hay pantallas táctiles, al igual que en el sector dedicado a los automóviles, donde después de ingresar la orden, un transportador electrónico alcanza la compra hasta el vehículo del cliente.
Si bien esta sucursal cuenta con empleados de carne y hueso que confeccionan el pedido, su apertura generó algunas críticas respecto de la precarización laboral y de un posible escenario apocalíptico en el que las máquinas dejan sin trabajo a las personas. Desde la cadena multinacional, por su parte, defendieron su decisión de automatizar la atención basándose en que así logran brindar una mejor velocidad y precisión en el servicio al cliente.
Una vez, hace ya unos años, el famoso actor y director de cine Woody Allen, dijo de manera pícara: “Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida”. Bueno, querido Woody, bienvenido: el futuro ya llegó y hay que cambiar el chip para no quedarse afuera.